9 de diciembre de 2007

MANERAS DE PASAR UN PUENTE

Habrá quien haya disfrutado de un largo fin de semana lejos de su lugar de residencia, desconectado del trabajo y las obligaciones cotidianas; habrá quien haya aprovechado el largo puente para viajar y conocer lugares; seguro que hay quien haya preferido quedarse en casa esperando que no suene el teléfono, que nadie le moleste, disfrutando de su familia, de su perro o de su soledad; habrá quien no haya podido disfrutar del fin de semana, gentes que trabajan de lunes a domingo, esclavos de la faena que les proporciona un jornal para sentirse libres...
Un servidor ha pasado el largo fin de semana en Málaga, esperando que mi hermana (la segunda de tres) se ponga de parto y me presente a mi tercer sobrino. Dentro de unas horas regresaré a Madrid con las ganas de conocer al peque y una maleta casi sin deshacer, por si hay que regresar pasado mañana, caprichosa que es la vida. Si de estas idas y venidas me sucediera algo en la carretera... Bromas que te gasta la vida. Tomaré cuidado de no engrosar las estadísticas de la DGT este año.
Decía que he pasado el fin de semana en Málaga, con la familia y los amigos, unos cuantos más que el fin de semana pasado. Y la mañana de domingo la he pasado descolgando las ventanas de aluminio y peuvecé de la cocina y ayudando a limpiarlas. Vamos, lo que hacemos todos antes de salir de viaje, ¿no?. Y ahora una ducha caliente-fría, almuerzo ligero con papá y mamá, maleta al coche, cámara a mano (tranqui, Calaverita, no la usaré a más de 130 Km/h) y buena música para acompañarme las próximas cinco horas, si no más por el tráfico de la Operación Retorno. Hoy toca lo nuevo de Chambao y Moonspell. Menuda mezcla!
¡Buen viaje!