6 de marzo de 2006

DIARIO DE UN NAVEGANTE PROSCRITO

"Vivimos en un submundo del que no queremos emerger, conscientes de nuestra ilegalidad y la comodidad de nuestra oscura existencia a los ojos de quien vigila.
Cada año miles de delincuentes acaban donde acaban los malos: Entre rejas. Cada uno de nosotros ha cometido mayor número de delitos que el más preso de todos; puede que no tan terribles pero abrumadoramente más numerosos, y reincidentes hasta la saciedad.
Como si de una competición se tratara, acumulamos más y más información y nos jactamos de ello como si de algo loable se tratara. La relativa seguridad que nos proporciona este falso anonimato nos hace crecer en algunos casos hasta estados demenciales, obsesivo-dependientes de nuestras aprehensiones, de nuestros logros cotidianos. Bajo pseudónimos de las más variopintas índoles damos conferencias de cultura global, altruismo, condescendencia, robinhoodismo neocomunista... en bitácoras recónditas con nombres indescifrables..."

Fragmento del 'Diario de un navegante proscrito'.
Ed. Obras ficticias - 2006.